Turquia
Agosto 2011
El pasado día 31 de Agosto a las 17/20h de la tarde, emprendimos viaje hacia Turquía. Salimos de Gijón en tren hacia Madrid, donde pasamos la noche, para al día siguiente coger el avión que nos llevaría a Estambul (en turco: İstanbul).
Estambul, única ciudad del mundo situada entre dos continentes, es una combinación armoniosa de tradición y modernidad, un cruce irresistible entre Oriente y Occidente. Antigua Bizancio y Constantinopla, fue la capital de dos de los mayores imperios conocidos (el romano-bizantino y el otomano), y en sus calles (y en sus numerosos monumentos) se palpa el peso de la Historia. Crisol de culturas que diría el tópico, es la ciudad más grande del país (aproximadamente 15 millones de habitantes) así como la capital económica, cultural y turística del país (no política, ya que dicha función recae en Ankara), y debe colocarse con derecho propio en el catálogo de urbes de imprescindible visita. Estambul es la ciudad de las iglesias, sinagogas y mezquitas; de Hagia Sofía, la Mezquita Azul y Solimán el Magnifico; del palacio Topkapi y Dolmabahçe; del Gran Bazar y el Bazar de las Especias; del Bósforo y el Cuerno de Oro. Como diría el poeta, "viuda aún virgen tras mil esponsales".
La llegada a Estambul fue impresionante, palpándose la especial atmósfera de esa ciudad milenaria ya durante el recorrido que nos llevó en taxi desde el aeropuerto. Nuestro hostal estaba situado en el barrio antiguo de Sultanahmet (zona en la que se aglomeran los principales puntos turísticos de la ciudad: Santa Sofía, La Mezquita Azul, el palacio de Topkapi, la mezquita Suleymaniye, el Gran Bazar o la Cisterna Basílica), justo al lado de la espectacular Mezquita azul, de la cual teníamos unas vistas privilegiadas desde el balcón de nuestra habitación y desde la propia terraza del hostal. Su simple contemplación justificaba el viaje.
En el sur del Egeo, muy cerca de Éfeso, la antigua capital de Asia Menor, se encuentra la pequeña ciudad de Selçuk. Esta localidad, de unos 25.000 habitantes, parece tenerlo todo. Podemos visitar el magnífico museo de Éfeso, la basílica de San Juan, la mezquita de Isa Bey Camii, el acueducto bizantino cubierto de nidos de cigüeñas... Sorprende la fascinante historia de este enclave: se encuentra a tan sólo tres kilómetros de la señorial Éfeso, en la colina que lo preside (la de Ayasuluk) san Juan escribió su Evangelio, a la entrada tenemos las ruinas del templo de Artemisa (antigua Maravilla del Mundo), posee varios hammanes del siglo XIV desperdigados por hermosos campos de frutales... ¿Qué más se puede pedir? Pues hay más.
Además de eso, se trata de una ciudad muy tranquila y agradable, con restaurantes de comida turca deliciosa y a muy buen precio. Además tiene una amplia oferta de hostels también a precios muy competitivos. Nosotros nos hospedamos en el hostal Atila s gettaway un hostal super guay. http://www.atillasgetaway.com/ os pongo la dirección para que pudasis comprobarlo por vosotros mismos.